El 1 de enero de 2025 viene con importantes novedades en materia de reciclaje de basuras o residuos sólidos urbanos. La nueva legislación europea y española (Ley 7/2022 de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular) ha obligado a los ayuntamientos a actualizar sus ordenanzas municipales y a no asumir pérdidas en el coste real de las operaciones de recogida, transporte, tratamiento y eliminación de los residuos. Además, van a estar fiscalizados por la Agencia Tributaria, que comprobará que coinciden las cifras de ingresos y de gastos en recogida y tratamiento de residuos sólidos urbanos.
Entra en vigor un sistema de pago por generación, con una tipología estructurada; esto es, los hogares abonarán una tasa adaptada a los residuos que generan.
Otro punto importante es la separación de residuos o «reciclaje». Municipios como Peligros tienen actualmente cifras de reciclaje equivalentes a las que tenía Alemania hace veinte años. La nueva ley obliga a las administraciones a educar a la población en reciclaje y economía circular, con repercusiones claras y directas: si el pueblo separa materiales, se le baja la tasa por emisión de gases en vertedero, y el Ayuntamiento puede trasladar esa bajada al recibo de las familias. En 2024, esto ha costado a Peligros 120.000 euros más, por no cumplir con los ratios que exige Europa. En resumidas cuentas, el municipio que cumpla, verá cómo disminuye el recibo de la basura que llega a los hogares. Quien contamina, paga.

El Ayuntamiento de Peligros se hace cargo de la recogida de residuos sólidos urbanos, en un proceso que le cuesta 900.000 euros cada año. Retira la basura seis de los siete días de la semana, y presenta una buena frecuencia en la limpieza de los contenedores, que se incrementará en 2025. Dispone además del punto limpio, que permite depositar fácilmente todo tipo de residuos.
Sin embargo, llega el momento de que la conciencia medioambienal entre en las casas. «Las familias tienen que poner de su parte y separar el papel, el vidrio o los plásticos cuando van a tirar la basura; tenemos que hacerlo por el medio ambiente, y por economía familiar, puesto que si reciclamos correctamente, podrá bajar el recibo», comenta el concejal de Agenda Urbana, Innovación y Proyectos Europeos, Luis Miguel Ortega Ceballos.
El concejal está yendo de la mano de la Diputación de Granada, que ha adoptado como política estratégica el tratamiento integral de los residuos. «La conciencia ambiental ya está puesta en una directiva europea y en una ley nacional, en el Ayuntamiento hemos hecho nuestro trabajo y las ordenanzas están actualizadas y en vigor a 1 de enero de 2025, llega el momento de que cada uno se haga responsable de lo que tira», sentencia el concejal.